Raíces Andinas y Sonidos Sagrados

Miércoles, 20 de noviembre de 2024

RAÍCES ANDINAS Y SONIDOS SAGRADOS

En sus melodías se encuentra el eco de los montes y los valles, reflejando los sueños de quienes habitan y habitaron en la cordillera de los Andes. Cada nota lleva consigo siglos de sabiduría ancestral, un canto que no solo relata, sino que preserva la profunda relación de los pueblos andinos con la naturaleza, en una danza de sonidos que resuena en lo más profundo de nuestra identidad. El próximo sábado 23 de noviembre, las históricas calles empedradas y las encantadoras casas coloniales de Playa de Belén se transformarán en un vibrante escenario donde las cuerdas de la bandola, el tiple y la guitarra impregnarán el aire de este municipio de relevancia patrimonial.

Así es el espectáculo que la agrupación “Palos y Cuerdas” nos ofrecerá en el marco de la gira COLOMBIA ES MÚSICA SACRA, una iniciativa que lleva melodías sagradas y espirituales a territorios de paz, con el propósito de unir esfuerzos en convertir antiguas zonas de conflicto en epicentros de creatividad, reconciliación y cultura. Obras como “Oración”, una plegaria instrumental nacida del bambuco, nos recordarán que la música es tanto un refugio como un puente hacia lo sagrado. La gira, organizada por el Festival Internacional de Música Sacra de Bogotá, tiene como própósito, no sólo conectarnos con las raíces musicales de nuestro país, sino también celebrar la diversidad; la capacidad del arte para transformar y el poder de la música para sanar, unir y trascender.

A propósito de este concierto, conversamos con Lucas Saboya, quien junto a sus hermanos ha hecho de “Palos y Cuerdas” un referente global de la música andina colombiana.

FIMSAC: Maestro Saboya, para empezar, Palos y Cuerdas tiene tres décadas de trayectoria. ¿Cómo se ha transformado su propuesta artística para mantenerla relevante tanto en Colombia como en el exterior?

Lucas Saboya: Con Palos y Cuerdas – Hermanos Saboya estaremos celebrando 30 años en 2025. Durante este tiempo hemos transitado en diferentes ámbitos de la música, entonces desde hace varios años Palos y Cuerdas no es solamente una agrupación sino un centro de trabajo, un laboratorio, un espacio de creación artística; primero como intérpretes, un rol que hemos asumido de la manera mas seria posible, estudiando a fondo la bandola, el tiple y la guitarra, cada uno de nosotros se ha especializado en uno de estos tres instrumentos de cuerda de la tradición colombiana y siempre hemos asumido nuestra agrupación como un ensamble de cámara, con todas sus posibilidades, tratando de apartar los prejuicios o supuestos sobre el formato. Luego hemos desarrollado varias facetas: la composición, la investigación, la producción y la formación, todo alrededor del trío. Hemos realizado proyectos con orquestas, con músicos de diversos géneros y países, investigaciones sobre estilos y compositores específicos, también creando repertorio para los instrumentos como solistas.

Creo que nuestro trabajo ha logrado crecer y estar vigente gracias a que hemos mantenido nuestros principios artísticos y estéticos durante estos treinta años. Realizamos proyectos que realmente nos interesan, los asumimos con absoluto compromiso y rigurosidad y tenemos un trabajo constante produciendo permanentemente, obras, discos, giras etc.

FIMSAC: ¿Cómo describiría la experiencia de trabajar como trío familiar? ¿Qué aporta esa conexión personal a la música que interpretan?

L S: Para nosotros ha sido realmente fundamental trabajar como trío familiar desde niños. Somos dos gemelos y un hermano mayor un año exacto, por esta razón nuestra etapa de formación musical y humana ha sido paralela. Los tres recibimos una educación en música clásica en la Escuela Superior de Música de Tunja y al mismo tiempo tuvimos un contacto profundo con la música colombiana del interior gracias a nuestro trío. Pienso que el encuentro musical de estos dos mundos hizo que tengamos una unidad técnica, conceptual y artística. Diría que Palos y Cuerdas ha sido testigo de nuestras vidas, y el mayor determinador de ellas. Todo esto es evidente en la música que interpretamos y creamos. Ahora todos somos padres y varios de nuestros hijos, que ya hacen música, son reflejos de Palos y Cuerdas.

FIMSAC: Su agrupación ha sido calificada como revolucionaria dentro de la música andina. ¿Qué creen que les ha permitido marcar esta diferencia en el panorama musical colombiano?

L S: La respuesta podría empezar con una frase de Eliécer Arenas que está en el texto de presentación de uno de nuestros discos: “No hay potencial revolucionario más grande que conocer a fondo todos los secretos de la tradición” yo añadiría que estos secretos deben tener nuevas lecturas y estar en dialogo con otros lenguajes y tradiciones musicales que los revitalicen.

No ha sido nuestro objetivo principal ser revolucionarios, sin embargo, estamos en una constante búsqueda desde el principio. Nos embarcamos en proyectos y nos juntamos con músicos que nos permiten exigirnos artísticamente e intelectualmente. Estamos reflexionando permanentemente sobre nuestro trabajo y exploramos caminos y rutas que creemos que pueden seguir desarrollando el potencial de nuestros instrumentos y de nuestra música, en ocasiones algunos de estos caminos han sido poco o nada transitados.

FIMSAC: Oración, una obra de su autoría, se incluye en el programa. ¿Qué inspiración hay detrás de esta pieza?

L S: Es una oración instrumental desde el bambuco colombiano, una pieza introspectiva, tal vez es una manera, como dice Atahualpa Yupanqui de “llevar el país adentro” podría decirse que es ciertamente una “música del interior”.

Oración es una pieza que hice hace varios años para un proyecto de formación instrumental en bandola, tiple y guitarra. Mas adelante decidí incluirla como cuarto movimiento en una suite para guitarra clásica porque me pareció valioso el tema melódico y el espíritu de la obra. Desde el principio elegí este título porque me gusta la sonoridad y el carácter de las palabras religiosas, así que tenía claro que ese debía ser el nombre.

FIMSAC: Por último, desde la perspectiva de los hermanos Saboya, ¿qué rol cumple la música en procesos de reconciliación y paz en Colombia?

L S: Pienso que si la idea de una sola persona, acompañada de trabajo, logra afectar a los distintos actores de su entorno, es suficiente para cambiar la estructura de un conjunto de individuos, sus dinámicas culturales, y por lo tanto su organización social. Son procesos que toman décadas, pero creo que la música como otras dimensiones del desarrollo humano, puede afectar positivamente a una sociedad, lejos del lugar común de que el arte por sí solo mejora las condiciones de un pueblo. La música puede ser un territorio común para los colombianos.

Entrevista por Jorge Piotrowski.

Sábado, 23 de noviembre de 2024, Parroquia San José (Playa de Belén), 4:00 PM.
MÚSICA RELIGIOSA COLOMBIANA
Palos y Cuerdas, trío instrumental (Colombia)
Daniel Saboya, guitarra
Lucas Saboya, tiple
Diego Saboya, bandola

Entrada libre hasta completar aforo.

www.festivalmusicasacra.com
@festivalmusicasacra
#FIMSAC

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